el blog de bubastis

martes, diciembre 13, 2005

Suicidio en el Aire

Christine Chubbuck trabajaba en la cadena norteamericana de noticias WXLT-TV y le había propuesto al director de contenidos del canal hacer un reportaje sobre el suicidio. Después de ser aprobado su proyecto se dirigió al departamento de policía de Sarasota (Florida) para que le instruyera sobre los métodos más eficaces para llevarlo a cabo.

El oficial que accedió a ser entrevistado le indicó que el sistema más seguro era dispararse a la cabeza con un revólver del 38 cargado con una bala con la punta agujereada al efecto de que el proyectil se dispersase dentro del cráneo del suicida.

Christine le comentó al director del noticiario que iba a mostrar ante las cámaras un revólver del 38 al efecto de ambientar la crónica. Cuando estaba en el aire Chubbuck dijo estas palabras:

"De acuerdo con la política del Canal 40 de brindarles siempre lo último en sucesos sangrientos en vivo y a todo color, les presentamos a ustedes, por primera vez, un intento de suicidio"

Inmediatamente se levantó la tapa de los sesos. Era el 15 de julio de 1974, Christine había pasado a la historia como la primera persona en suicidarse en directo frente a las cámaras de televisión.

El cámara, al oír las palabras de la presentadora, dejó de grabar, por lo que los espectadores tan sólo pudieron ver como la pantalla se volvía negra al tiempo que retumbaba el disparo.

Si quieren saber más sobre este asunto, diríjanse a la wikipedia.

4 Comments:

At 3:18 p. m., Anonymous Anónimo said...

Además de periodista y suicida, exhibicionista frustrada.

 
At 8:11 p. m., Blogger Carlos César Alvarez said...

Si sucediera hoy, el cámara seguiría grabando

 
At 10:53 a. m., Blogger Aura said...

Que sangre fría. Sylvia Plath desnudaba sin pudor su flirteo con Hades en "La campana de cristal" y en Japón los jovenes crean clubs de suicidas para no morir solos.
El dulce y joven Werther me dice:
"Cuentan que hay una raza noble de caballos que, cuando se sienten muy sofocados y batidos, se muerden ellos mismos, por instinto, una vena para poder recobrar aliento. Lo mismo me ocurre a mí muchas veces: quisiera abrirme una vena que me procurase libertad eterna"

Un saludo.

 
At 7:08 p. m., Anonymous Anónimo said...

Eso es profesionalidad, y lo demás, tonterías.

Abrazo orgiástico.

 

Publicar un comentario

<< Home