La Máquina de Sueños
Hoy les voy a hablar de un aparato fascinante, el único que ha sido diseñado para ser visto con los ojos cerrados. La Máquina de Sueños (Dreamachine) fue diseñada por el poeta Brion Gysin y el matemático Ian Sommerville, dos miembros de la generación Beat.
La construcción de una Máquina de Sueños es muy sencilla, basta con coger un cilindro opaco, se hacen pequeños agujeros en él y se pega a la bandeja giratoria de un reproductor de discos que funcione a una velocidad de 78 r.p.m. En el medio de la Máquina (dentro del cilindro, claro) se coloca una lámpara de 100 watios de modo que cuando te sientes frente al artilugio, la luz de la lámpara llegue a tus ojos cerrados intermitentemente con un ritmo de 7 a 13 flashes de luz por segundo (ritmo de las ondas Alfa del cerebro humano).
Los usuarios de esta máquina describen que las sensaciones que les crea son muy similares a los efectos que pueda causar una droga psicoactiva; manifiestan que genera un sueño lúcido que permite penetrar en el subconsciente más profundo.
Si quieren probarla (bajo su responsabilidad, claro), aquí pueden leer una guía práctica y sencilla para constuirse una y aquí un lugar donde adquirirla. Tengan cuidado porque puede ser peligrosa para personas epilépticas e, incluso, puede inducir al suicidio de los usuarios (se dice que Kurt Cobain era muy aficionado a ella y que Iggy Pop también disfruta de sus efectos).
Sin más, le deseo felices sueños.
8 Comments:
Pues no sé si mi comentario es una salida de tono pero tu post me ha recordado a una canción de un grupo californiano de los 90 llamado Sukia.La canción en cuestión se llamaba 'Dream machine'.Supongo que se inspiraron en el artefacto que describes.
Y un dato absolutamente demencial.A un miembro de dicho grupo le recordareis porque es el niño que era introducido en la cabina del avión en la película 'Aterriza como puedas'.Se llama Ross Harris.
Somos una generación sobreinformada,sin duda,mi cabeza ha volado desde William Burroughs a Kareem Abdul Jabbar en 10 segundos.
Sr. Anónimo, me acaba de dejar atónito. Creo que Vd. no necesita la Máquina de los Sueños para tener una rica vida interior.
Es un artefacto interesantísimo. Me fabricaría uno si no fuera tan patoso para el bricolage.
Prefiero tomarme una pastillita psicodélica en todo caso, porque tanto rollo me asusta...
A mí me sobran narices para probar el invento (así me va, claro), pero no soporto los libros de instrucciones. Por otra parte, aunque has sido bastante claro en tu exposición, odio el bricolaje.
Nada, que me veo sin probar la dichosa máquina. Quién sabe, a lo mejor por ahí me salvo.
Por cierto, este post tan genial me ha recordado uno (mucho menos brillante, sin duda alguna) de mi antigua orgía, titulado "Vehículos inteligentes". Te dejo el enlace por si te apetece leerlo:
http://blogia.com/laorgiaperpetua/index.php?idarticulo=200506271
Buenas noches orgiásticas.
¡Muy bueno lo del orgasmatrón!, hagan clic en en el enlace y déjense sorprender por la creatividad humana (y la sorprendente escasez de voluntarios).
Por cierto, no hay que saber bricolage para probar la Dreamachine, se puede comprar (aunque el precio no es precisamente popular).
Ya me di cuenta de que se podía comprar también, pero tendría que acudir a otro libro de instrucciones. Es que me dan un yuyu...
Bueno, tendremos que seguir investigando maquinillas, ¿no?
Nunca hay que dejar de explorar...
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